El pasado viernes estuvimos trabajando en nuestro taller de PlaterArte la famosa obra expresionista "El grito" (1893), del pintor noruego Edvard Munch. Un peculiar cuadro que refleja el estado anímico que tenía el artista en el momento en el que lo pintó y que transmite, como hablamos en clase, sensaciones de tristeza, angustia o miedo.
Esta obra que se encuentra en la Galería Nacional de Noruega se caracteriza por el contraste de sus colores, los tonos naranjas y rojos predominan para el cielo, y los azules y marrones para el mar y el paseo donde se encuentra un hombre con extraña expresión en el rostro. La técnica empleada fue el óleo, temple y pastel sobre cartón. Nosotros, en cambio, hemos usado las ceras Manley sobre cartulina blanca en A4. El resultado ha sido realmente interesante. He aquí una muestra de nuestro trabajo.
Existen muchas versiones de "El grito", te dejo algunas. Espero que te gusten.
Homer y el grito |
Calamardo y el grito |
También pusimos en práctica la técnica del esgrafiado. ¡Y con muy buenos resultados! Te dejo un vídeo para que practiques en casa por si no te acuerdas cómo se hacía. Tan sólo te harán falta ceras blandas, papel, algún objeto con punta como el capuchón de un boli o un tenedor de plástico y un poquito de creatividad.